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Diego Matheuz, Necesitamos más espacios para hacer música en Venezuela
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Escrito por: Lorena Quintanilla Muñoz
Publicado en El Impulso de Barquisimeto
Diego Matheuz, titular del Teatro La Fenice de Venecia compartió este jueves con periodistas de EL IMPULSO, como también con el arquitecto Juan Manuel Carmona, director de esta casa editora; Alicia Feaugas de Carmona, directora de la Fundación Juan Carmona; Violeta Villar Liste, jefe de Información y María Hortensia Zapata, coordinadora del área de Redacción.
El joven músico de 27 años de edad, visitó este rotativo en compañía del maestro Alfredo D' Addona, director de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Lara, para ofrecer detalles sobre sus experiencias como director invitado de las más importantes orquestas europeas, proyectos e inquietudes. A lo largo del encuentro, el artista respondió cordialmente a cada unas de las preguntas que los presentes realizaron, como también a los lectores que, vía twitter, tuvieron la oportunidad de comunicarse con Matheuz, quien de manera convincente, dio cuenta de su sensibilidad por la música, jovialidad y carisma.
Ola de directores
Desde el año pasado Matheuz no pisaba suelo barquisimetano cuando efectuó un concierto con la Sinfónica Juvenil Simón Bolívar en Caracas, si bien, el concierto se realizó en la capital, tuvo oportunidad de acercarse a su terruño. Desde 2011, el también violinista concebido en el seno del Sistema de Orquestas del país, preside el Teatro La Fenice de Venecia, al respecto, Matheuz comentó que fue el concierto de año nuevo, efectuado el 31 de diciembre pasado, el evento que marcó su desempeño como conductor del templo de la ópera. "Este concierto fue transmitido en vivo por la RAI, ha sido el más visto hasta ahora... lo vieron más de siete millones de personas. Ese día todo el mundo está de fiesta, para ello, la orquesta se preparó muy bien".
Apenas comienza el movimiento, es ahora cuando viene una ola de directores de orquestas, respondió Matheuz al arquitecto Juan Manuel Carmona, cuando le preguntó cómo se siente al ser reconocido fuera de nuestras fronteras. "Todos hablarán de Venezuela, sobre todo, de directores de orquestas... me siento muy contento porque todo el mundo volteó su mirada para saber del sistema. En las giras, me encuentro con personas que desean conocer al maestro José Antonio Abreu y en consecuencia, seguir su ejemplo. Todos estamos dispuestos a darle continuidad, esa es nuestra misión y es lo que quiere el maestro Abreu, quien ha sido un visionario".
Diego Matheuz asume con frecuencia las orquestas de Italia. Es uno de los invitados predilectos. En ese sentido, quisimos conocer qué cualidades distinguen a estas orquestas de las venezolanas. El músico aseguró que Venezuela cuenta con características especiales. "Su energía es muy particular. La manera de tocar del Sistema de Orquestas es completamente diferente. En Europa se vuelve un tanto rutinario. Llegas, ensayas, diriges el concierto y listo. Aquí se trabaja mucho más. Estos días, a propósito del concierto en homenaje a Jacinto Lara, comenzamos a ensayar desde las 8:30 de la mañana hasta las 8:00 de la noche sin parar. Esa es nuestra manera de trabajar, eso nos lo inculcó el maestro Abreu y creo que allí está la diferencia... a ello se le suman la disciplina y la constancia. Somos latinos, prosiguió, no podemos negar eso, como tampoco la filosofía del maestro Abreu, quien nos dice que aunque las cosas salgan bien, siempre pueden resultar mejores.
-¿Qué impresión denotan los músicos de estas orquestas europeas, con tradición de música académica, cuando se encuentran bajo la batuta de un venezolano, tomando en cuenta que se trata de un movimiento con un poco más de 30 años?
-Gustavo Dudamel rompió esos paradigmas y abrió cantidad de puertas para quienes vamos detrás. Gracias a él y al maestro Abreu nosotros hoy día tenemos las mismas oportunidades. En el mundo las orquestas quieren algo similar... pero nosotros tenemos algo más que rompe con todos los estándares. Se trata de la extraordinaria preparación y la multiplicación de orquestas. Venezuela tiene una gran ventaja. Los músicos tenemos cientos de orquestas a nuestra disposición. En Europa un joven que se esté formando como director de orquestas, estudia en su conservatorio y tiene una vez al mes un ensayo de media hora con una orquesta. Nosotros nos paramos frente a una orquesta todos los días. El director de orquesta nace con la práctica, es algo básico.
-¿Qué le pedirías al Gobierno?, le preguntó el arquitecto Carmona
-Necesitamos más espacios. Es lo único que pediría. Cada ciudad debe contar con un espacio digno para el sistema.
Italia, su segunda casa
Sobre sus inicios, Matheuz recordó que comenzó en Barquisimeto en un coro de niños en la Casa de la Cultura Julio Garmendia a la edad de 6 años. Más tarde formó parte de una estudiantina, en ese entonces comenzó sus estudios de mandolina en Cabudare. Luego pasó a formar parte del Conservatorio Jacinto Lara, se inició tocando el chelo, no obstante esto fue por tan sólo dos semanas, pues su papá le sugirió tomar el violín. Inmediatamente integró la Orquesta Doralisa de Medina bajo la tutela del profesor Luis Giménez. Al poco tiempo se encontró en la Orquesta Sinfónica Juvenil de Lara a cargo del maestro Alfredo D' Addona. Al culminar el bachillerato partió a Caracas. "Casi nunca iba a clases porque siempre estábamos de gira, matemática se me dificultaba un poco, pero me iba bien en las demás... yo estaba claro, le dije a mi papá que al terminar el bachillerato me iría a preparar a Caracas", evocó entre risas. Sobre su influencia musical dijo que viene de su padre, quien toca el cuatro. Hoy día sus padres forman parte del Coro de Adultos. Sus dos hermanas también son artistas. Ya en Caracas formó parte de la Orquesta Simón Bolívar. "Cuando tenía como veinte años el maestro Abreu me preguntó qué quería hacer, además de tocar el violín... le dije que me llamaba la atención dirigir. Me dijo: vente mañana y te doy tu primera clase, eso fue todo, desde entonces todo cambió".
-¿Al comenzar sus estudios de dirección delega el violín?
-No, esto ocurre cuando en Londres la empresa de managers Askonas Holt me adopta. Comienzo a tener conciertos fuera y hubo un momento en que no podía más con las dos cosas. Me estaba yendo también como director que tomé ese camino. A veces toco el violín y lo estudio. El problema es el tiempo, no puedo cargarlo conmigo porque a veces ando con una maleta de 15 kilos de partituras.
-De sus presentaciones con las orquestas de Londres, Berlín, Japón, China, ¿alguna anécdota en particular?
-En Japón me fue muy bien, considero que dirigí la mejor orquesta del país. El público se enloqueció, parecía un concierto de rock, me preguntaba Dios mío qué pasa aquí. Vuelvo a Japón el año que viene... cada orquesta es una experiencia única.
-En 2011 tuvo la oportunidad de llevar a la Orquesta Simón Bolívar de gira por Italia, ¿cómo recuerda esta experiencia?
-Fue increíble. Italia me abrió las puertas internacionalmente, allí trabajo y vivo. Es mi segunda casa. Llevar a la orquesta fue algo muy satisfactorio. La gira fue un éxito.
-¿Qué puntos está trabajando para imprimirle ese matiz particular a las orquestas de Europa?
-En Italia sobre todo, los músicos son tradicionalistas. He ido poco a poco estableciendo cambios. Tratando de llevarlos a lo que deseo. En el mundo de la ópera y en Italia no perdonan, por ello son cambios paulatinos... sin embargo todo va viento en popa.
-¿Qué nos puede comentar sobre el proyecto La Fenice, una orquesta de jóvenes que desea fundar?
-Trabajamos para crear el Sistema de Orquestas en Venecia, específicamente la Orquesta Antonio Vivaldi de Venecia. Trabajamos con la Alcaldía de Venecia, la iglesia San Marcos y el Sistema de Orquestas de Italia. Se está haciendo un estudio para organizar el proyecto que arranca el año que viene. Vamos a comenzar con una pequeña orquesta de cuerdas y un ensamble de metales.
-Su debut internacional fue en 2008 con la Bolívar en Puerto Rico, desde entonces no ha parado ¿cuál es la meta?
-Para mí es llegar a los 80 años haciendo música, donde sea. Todos tenemos sueños y si hacemos las cosas bien, todo llegará en su momento.
-¿Valores que dejó en usted el Sistema y los maestros José Antonio Abreu y Claudio Abbado, a quienes ha llamado sus mentores?
-El sistema, disciplina y amor por nuestro país. El maestro Abreu, constancia. Claudio Abbado, la honestidad hacia la música.
-¿Considera que hay un antes y un después en la historia de la música académica luego de la creación del Sistema de Orquestas en Venezuela?
-Definitivamente, el movimiento orquestal ha roto con todos los esquemas. Lo que se está haciendo aquí en el país es el futuro de la música.
-Siendo uno de los directores de mayor proyección internacional, ¿qué mensaje le envía a esos jóvenes que siguen sus pasos?
-Estudiar y prepararse. Aprovechar que tenemos tantas orquestas y posibilidades para hacer música. Aprovechar las oportunidades, sembrar para cosechar después.
-¿Si tuviese que dirigir una obra por la paz y la unión de los venezolanos cual sería?
-La que ejecutaré el sábado. La Oda a la Alegría es tremenda obra para llevar un mensaje de paz.
EXTENSORES DE SU CUERPO
Sobre su relación con el violín y la batuta, el músico expresó que se trata de extensores de su brazo. "El violín es parte de mí. Es un instrumento sumamente difícil, no puedes parar de estudiar, porque de lo contrario, pierdes lo que hiciste ayer y la semana pasada... hay que practicar todos los días. Por ello estudié en Caracas con el maestro José Francisco del Castillo, padre del violín en Venezuela". La batuta, añadió, es una extensión de mi brazo para estar más cerca de los músicos.
"Más que la batuta, la concentración, es lo primordial. Una vez le pregunté al maestro Claudio Abbado, cómo hacía para dirigir todas las obras de memoria, él me dijo, si yo no dirijo una obra de memoria es porque no la conozco bien y es así".
EN SÍNTESIS
Una virtud: no sé
Un defecto: soy muy intranquilo
Un pasatiempo: hacer una parrilla con los amigos y descansar en casa
Qué libro está leyendo: Gomorra sobre la mafia italiana de Roberto Saviano
Un compositor: el que estoy abordando
Un principio: Hay que tocar como si fuese el último día de tu vida y entregarlo todo, nunca bajar la guardia
Qué lleva en su Ipod: tengo dos, uno de música clásica y otro de música de todo tipo
Obras con las que se identifica: con el repertorio ruso. Filosofía del maestro Abreu debido a su orquestación.
Su relación con Dudamel: siempre estamos en contacto, somos muy cercanos.
Lo más barquisimetano que tiene: me encanta el suero y soy cardenalero
Un momento inolvidable: siempre que estoy sobre el podio
Lo más gratificante: la música me ha hecho crecer y madurar, nunca dejas de aprender
Sobre la suerte en el ámbito musical: Hay momentos claves, no necesariamente tienen que estar ahí, pero siempre hay que estar preparado
Planes de boda: todavía no
TWITTER FORO
-¿A qué edad y cuánto tiempo te tomó aprender a dirigir orquestas? Vía @mariperez
-A los 13 años tuve mi primera experiencia en el Domo Bolivariano de Barquisimeto dirigí el Himno del estado Lara, pero realmente empecé a tomar clases en 2005, a partir de los 20 años cuando el maestro Abreu me preguntó si quería aprender a dirigir. Cuando tenía 4 años dirigiendo me tomó la agencia de Londres, y en 2011 asumí el rol de director principal en el Teatro La Fenice de Venecia dirigiendo el concierto de año nuevo.
-¿Cómo te visualizas en unos años? Vía @karinadugarte
Nací para hacer música, yo creo que un músico nace, no se hace. Me veo llegando a los 70, 80 años haciendo música de la forma como nos enseñó el maestro Abreu, con disciplina, tocando como si fuera el último día de tu vida.
-¿Cómo es tu relación con Gustavo Dudamel? Vía @jose_lacruz
Somos muy amigos, siempre estamos en contacto, cuando va a Europa nos vemos, hemos podido compartir escenario. El año pasado dimos un concierto en el Auditorio Parco della Música, de la Academia Nacional de Santa Cecilia en Roma, compartimos esa gira en Italia, el hizo la primera parte y yo la segunda.
-¿Cuál es el mejor legado del maestro Abreu? Vía @solmariavl
La disciplina, la constancia, la dedicación, el amor por tu país, el deseo de seguir estudiando y preparándonos, hay que sembrar frutos para ver resultados, porque nunca encontrarás la perfección. Debes poner la mente en todo lo que hagas, la concentración es lo más importante. La filosofía de trabajo es siempre hacerlo mejor a pesar de que ya salga bonito.
-Describe tu experiencia en el Sistema Nacional de Orquestas. Vía @hector_donvilla
Somos una gran familia, todos somos iguales, muchachos que antes tenían pistolas en sus manos ahora tienen una batuta, un instrumento, y son directores de un núcleo. El futuro de la música, es lo que todos estamos haciendo, seguimos trabajando, y la gente va a ver en 100 años nuestro legado.
-¿Qué necesita Venezuela para convertirse en una potencia musical? Vía @calonsov
Necesitamos más espacios, nuestro país ha roto con todos los esquemas, pero siento que necesitamos más espacios para la música, escuelas de música más grandes, conservatorios en todas las ciudades. También, cada ciudad debería contar con un teatro apto para presentaciones de música clásica. Que cada ciudadano pueda tener acceso a la música clásica.
-¿En qué otro teatro quisieras presentarte como director de orquesta? @daniriera
Hay muchos, pero sueño con dirigir en la Orquesta Filarmónica de Viena y de Berlín.
-¿Qué significa la música para ti? @lapeve
La música me ha hecho crecer y madurar. El poder de la música es impresionante, te recrea sentimientos, cualquier pieza tiene un significado. Poder generar emoción en el público a través de la música es gratificante, y eso se logra logrando empatía con tus músicos, en los ensayos se crea toda la magia que luego se da en un concierto.
-¿Has hecho composiciones? @andrepetite
Hasta el momento no.
-¿Cuál es el mensaje para los niños y jóvenes que están iniciando su carrera como director? @solevivas
Que conserven el valor de la disciplina y la dedicación, aquí hay oportunidad de ser músico, pero hay que estudiar y prepararse.
Aprovechar la oportunidad que tenemos en Venezuela, con tantas orquestas que hay, si quieres ser músico debes aprovechar las oportunidades que se te presentan.
Fotos: Edickson Durán
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